CÓMO TRASCENDER LAS GUNAS

Las personas virtuosas no deben llevar a cabo buenas obras en beneficio de los demás con el propósito de obtener reconocimiento, fama o satisfacción egoísta.  En cambio, es preciso ejecutar todas las acciones con el deseo de complacer a Dios.

Todas las acciones que el verdadero yogui realiza le proporcionan felicidad y sabiduría.  Él comprende que todas las buenas acciones y cualidades manan del alma y no del ego, y sabe por qué las buenas acciones que se realizan con orgullo egoísta conducen al cautiverio de las encarnaciones, y por qué esas mismas buenas acciones conducen a la liberación si se llevan a cabo pensando que el Señor es el Hacedor.

Por ejemplo, si una persona come con el único propósito de nutrir el cuerpo considerándolo como el templo de Dios, no incurre en creación de karma alguno (ni siquiera buen karma).  Alimentarse con este fin significa actuar al servicio de la Divinidad; de este modo, no se satisface la gula del ego.  La persona que muere sin vencer el deseo de complacer su sentido del gusto a través de deliciosas comidas debe reencarnar en la tierra, por exigencia de la ley cósmica, para satisfacer sus ansias.  De modo subconsciente, ¡No está dispuesta a permanecer en un cielo desprovisto de cocinas y cocineros, de curry y pasteles!

Paramahansa Yogananda.  “Dios habla con Arjuna, El Bhagavad Guita". Volumen II, pág 391.