EN SEPTIEMBRE EL MAHASAMADHI Y NATALICIO DE LAHIRI MAHASAYA

Fue a la edad de treinta y tres años cuando Lahiri Mahasaya vio el cumplimiento del propósito para el cual había reencarnado en la tierra: encontró a su gran maestro Babaji, cerca de Ranikhet, y recibió de él la iniciación en Kriya Yoga.
Este afortunado evento no benefició solamente a Lahiri, sino que fue un momento afortunado para toda la raza humana.  El más elevado arte del yoga, que permaneciera perdido y largamente olvidado, fue traído otra vez a la luz.

Así como el río Ganges descendió del cielo a la tierra, según relatas los Puranas, para mitigar con sus divinas aguas la sed del devoto Bhagirath, así en 1861 el río celestial del Kriya Yoga comenzó a descender desde las secretas cimas del Himalaya hasta las polvorientas moradas de los hombres.  (Autobiografia de un yogui, Paramahansa Yogananda pag 335)